El 6 de julio es la fiesta de Santa María Goretti, la niña de once años que fue asesinada de 14 puñaladas por resistirse a una violación y que antes de morir perdonó a su asesino.
El Papa Pío XII en la canonización de Santa María Goretti, señaló:
“Aprenda la alegre niñez, aprenda la animosa juventud a no abandonarse lamentablemente a los placeres efímeros y vanos, a no ceder ante la seducción del vicio, sino, por el contrario, a luchar con firmeza, por muy arduo y difícil que sea el camino que lleva a la perfección cristiana, perfección a la que todos podemos llegar tarde o temprano con nuestra fuerza de voluntad, ayudada por la gracia de Dios, esforzándonos, trabajando y orando”.
El Papa la llamó "una mártir de la santa pureza”. Durante esta ceremonia Su Santidad Pío XII exhaltó la virtud de la santa y sus estudiosos afirman que por la vida que llevó aún cuando no hubiera sido mártir habría merecido ser declarada santa.
Santa María Goretti es la santa más joven reconocida oficialmente de la Iglesia Católica.
Ella es modelo de pureza, un modelo que todos debemos tratar de imitar. Ella se negó a romper los Mandamientos y por eso ella fue recompensada con la vida eterna. Santa María Goretti es un modelo de valentía y de amor a los mandamientos de Dios para todos nosotros, especialmente para los jóvenes.