"Veo con profunda tristeza como las modas indecentes, como lepra en el cuerpo de la sociedad, han invadido todos los ambientes. En las playas, balnearios y en la ciudad ya no se puede estar sin encontrarse con escenas lamentables de señoras y señoritas que, bajo el pretexto de seguir la moda, exponen impúdicamente sus cuerpos como ganado. Nosotros reprobamos enérgicamente tales costumbres paganas y exhortamos a los prelados y demás sacerdotes que prediquen a tiempo y a destiempo en contra de las modas indecentes, y prohíban que las mujeres asistan a los divinos Oficios en trajes inmodestos, ni menos que puedan comulgar ni ser madrinas y que los confesores nieguen la absolución a aquellas mujeres que no quieran apartarse de seguir las malas modas."
Papa Pío XII.
Alocución a las mujeres cristianas, 29 de agosto de 1954.