Quantcast
Channel: Catolicidad
Viewing all articles
Browse latest Browse all 3979

ESCANDALOSO SACRILEGIO DE UN SACERDOTE MODERNISTA ARGENTINO: BENDICE UNA RELACIÓN HOMOSEXUAL EN UNA CEREMONIA RELIGIOSA

$
0
0
"Si un varón se acuesta con otro varón como se hace con una mujer, han cometido una abominación". Levítico XX, 13

El padre Sergio Lamberti presidió el sacrílego acto

Un sacerdote modernista celebró una ceremonia "religiosa" en la que bendijo el pecado de sodomía de dos hombres, uno de ellos transexual que antes había recibido de la presidenta Cristina su reconocimiento dizque de "mujer", con su nuevo DNI y su nuevo nombre: Luisa Lucía Paz (ver video abajo), y que el día anterior dizque había contraído "matrimonio" civil con su pareja homosexual con la que ha convivido durante veintinueve años. 

El P. Sergio Lamberti bendijo "la unión" de "Luisa", y José Coria, en la parroquia Espíritu Santo del barrio Ejército Argentino de la ciudad de Santiago del Estero. El sacrílego ministro afirmó: «No estamos celebrando el sacramento del matrimonio católico. Estamos celebrando el amor de Dios entre los hermanos...Estamos reunidos celebrando el amor de Dios en nuestras vidas, un amor que estaba desde el origen de nuestra existencia», y dirigiéndose a "Luisa" y José involucró blasfemamente a Dios, pues los instó a que ese amor de Dios «que los ha sostenido en momentos de dificultades, de alegría, de esfuerzo cotidiano por hacer que la opción de vida que han tomado sea respetada por todos, sea el que los acompañe por el resto de sus vidas». Además sostuvo que«Jesús siempre está presente en el camino que nos toca recorrer y por eso le pedimos que renueven el compromiso de estar juntos, como lo vienen haciendo hace ya 29 años»(haz clic aquí).

Es decir que el sacerdote modernista implícitamente reconoció que no los pudo casar porque la Iglesia prohíbe el matrimonio entre homosexuales, pero realizó una parodia religiosa como si Dios bendijera las uniones civiles homosexuales que dizque se consideran "matrimonios". Y además los instó a permanecer como tales y refrendar su compromiso de convivencia homosexual. Todo dizque en el nombre y con la supuesta bendición de Dios, al que blasfemamente involucró. Por supuesto, muchos han interpretado la sacrílega ceremonia como si se les hubiera casado efectivamente por la Iglesia Católica y hubieran recibido el santo sacramento del matrimonio. Para colmo y mayor confusión, el pade Lamberti escogió el evangelio de las bodas de Caná que se emplea habitualmente en los matrimonios eclesiásticos.

Esta noticia corrió -por todo el mundo- como reguero de pólvora hace cuatro días, mismos que hemos esperado intencionalmente antes de publicar esta nota para ver si se presentaba alguna sanción de monseñor Vicente Bokalic, obispo de Santiago del Estero, al sacrílego sacerdote Sergio Lamberti. ¿Hubo excomunión?. Ninguna. ¿Suspensión a divinis?. Tampoco. ¿Al menos alguna admonición o alguna sanción menor?. Ni por asomo.  ¿Alguna declaración pública?. Sí. El obispo se concretó a señalar que no puede haber matrimonio homosexual, de acuerdo con la doctrina católica y citó el catecismo y el Código de Derecho Canónico (ver aquí). ¿Eso fue todo?. Sí.

Dios los hizo varones.
Se presentaron ataviados como si fuese boda.
Y muchos han tomado como tal esa sacrílega ceremonia.
Esto es, al sacerdote ni se le sancionó, ni se le reconvino, ni siquiera la más ligera llamada de atención por su sacrilegio. No se calificó esa parodia blasfema y sacrílega como tal; vaya ni fue señalada como inconveniente, al menos. Solo el obispo declaró que ahí no hubo ni sacramento ni matrimonio. De lo demás, no había nada que decir. Ni la menor episcopal palabra por parte del excelentísimo señor obispo, ni tocar siquiera al ministro -que traicionó a Cristo- con el más suave pétalo de una rosa. No se fuera incomodar ese sacerdote que se supone está bajo su autoridad. Que su subordinado se haya burlado de la doctrina de Dios es algo irrelevante para el señor obispo, que contraríe la moral católica es asunto de poca monta para Su Excelencia, que haga una parodia religiosa de un santo sacramento instituido por Cristo es un asunto menor, que se escandalice al pueblo y se presente la práctica homosexual como un camino bendecido por Dios ¡nada importa!. El señor obispo cumplió con su conciencia al decir que ahí no hubo matrimonio y dio la vuelta a la hoja de todo este asunto, ¡qué importa el escándalo mundial y la profanación a lo sagrado!, él ya había dejado aclarado el asunto. No había nada más que decir.

Y si el obispo no cumplió con su misión y se cruzó de brazos, dado el escándalo mundial ¿no sería de esperarse alguna intervención de Roma contra el obispo que pecó de omisión y contra el cura sacrílego que profanó el templo con su sacrílego acto? Pues sí, pero hasta ahora no se ha presentado. Cierto que no todo llega a Roma, pero este caso no pudo pasar desapercibido pues corrió como reguero de pólvora a nivel internacional. Cierto, también, que Roma a veces no actúa con premura, pero este caso tuvo tal impacto mundial que al menos merecería una declaración previa y ya luego, si se quiere, tomar las medidas conducentes. Suponemos que esto sería lo conveniente. ¿O estaremos equivocados?. Esperemos, pues, otro poco, aunque sinceramente no con mucha esperanza.

"Luisa", un varón que recibe su documento de identidad (DNI) de dizque "mujer"

El asunto está que el sacrilegio cometido tiene antecedentes, si bien no en caso de parejas homosexuales, sí en los casos de parejas divorciadas vueltas a dizque a casar por el civil a pesar de seguir realmente con el vínculo del matrimonio eclesiástico ante Dios, que permanece hasta que la muerte los separe. En efecto, algunos sacerdotes modernistas, en diversas partes, ya han dado "bendiciones" religiosas a personas divorciadas y a su nueva pareja, durante misas o actos litúrgicos en templos católicos que deberían estar destinados sólo a los verdaderos sacramentos. Hay, en efecto, modernistas que se prestan a esta infamia y a esta parodia, de dizque bendecir uniones, como si Dios autorizara el amasiato que ellos "bendicen". Y poco se ha hecho para evitar estos gravísimos sacrilegios. Y no sólo eso, sino ahora también hay cardenales -como Kasper- que contrariando los preceptos divinos, proponen dar la Sagrada Comunión a las parejas en amasiato que viven permanentemente en pecado mortal. Lo que lamentablemente ya ocurre, también, en algunas partes.

La situación por la que atraviesa la Iglesia es grave, muy grave. La apostasía universal está predicha en la Biblia. Revelaciones privadas como La Sallete y Fátima nos previenen de muchos acontecimientos. Las profecías bíblicas nos hablan -por boca de San Juan- de la ABOMINACIÓN DE LA DESOLACIÓN en el lugar santo. En fin, el modernismo y el mal se van generalizando e infiltrando por toda la Iglesia. Todo esto sacudirá la fe y hará tambalear y caer a muchos. Solo será salvo el que persevere fiel hasta el final. Será la prueba para los elegidos. Aquellos que mantengan íntegra la fe y cumplan los mandamientos. Pidamos a Dios ser de ellos y oremos para desagraviar a Dios de tanto pecados y males, que son mucho más graves cuando los realizan eclesiásticos por tener éstos, como es lógico, muchísima más responsabilidad. 

Finalizamos con las palabras de Santa Catalina de Siena: 
 «..-mi queridísimo pastor, yo os pido que obréis de modo que el día en que la suprema Verdad os juzgue no tenga que deciros esta dura palabra: “Maldito seas, tú que no has dicho nada”.¡Ah, basta de silencio!, clamad con cien mil lenguas. Yo veo que a fuerza de silencio, el mundo está podrido. La Esposa de Cristo ha perdido su color (cf. Lam 4, 1), porque hay quien chupa su sangre, que es la sangre de Cristo, que, dada gratuitamente, es robada por la soberbia, negando el honor debido a Dios y dándoselo a sí mismo» (haz clic aquí).

Fotos del Diario Panorama.


Viewing all articles
Browse latest Browse all 3979

Trending Articles