El principio de todo derecho es el de la Vida; sin éste todos los demás caen por tierra. Nadie puede hablar de "derechos humanos" si no defiende el principio y fundamento de todos los demás, hacerlo así es propio sólo de hipócritas.
Si eres voz de los que aún no la tienen, un día Cristo te dirá: Venid bendito de mi Padre porque cuando alzaste tu voz por mis pequeños, en cuanto lo hiciste por ellos, a Mí lo hicisteis.
¡No calles!, también hay complicidad en los pecados de omisión.
Si eres voz de los que aún no la tienen, un día Cristo te dirá: Venid bendito de mi Padre porque cuando alzaste tu voz por mis pequeños, en cuanto lo hiciste por ellos, a Mí lo hicisteis.
¡No calles!, también hay complicidad en los pecados de omisión.